Entre 2009 a 2011, MySpace veía como había perdido la batalla por establecerse como una red social importante, por lo que sus ejecutivos habían decidido enfocar la plataforma 100% en la música y para ello querían adquirir Spotify.
Sean Percival, ex ejecutivo de MySpace, declaró que en la plataforma tenían claro que era muy difícil competir contra Facebook o el incipiente Twitter, por lo que querían centrarse en la música, ya que tenían contratos con grandes sellos para reproducir música de forma gratuita.
Percival relata que para cuando quisieron comprar Spotify, ellos eran el único sitio que tenía los permisos legales para distribuir música vía streaming a los usuarios, una tarea que ahora realiza el servicio que ellos quisieron comprar.
Según Percival, MySpace cometió el error de no apostar todo por la música y que luego de ser rechazados por los creadores de Spotify para cerrar una venta, no se hicieron mayores esfuerzos por establecer a la red social de vuelta al estrellato, siendo ahora propiedad de Justin Timberlake y la empresa Specific Media LLC.