Los inversores de Disney han presentado una demanda contra la compañía, alegando que se han manipulado las cuentas relacionadas con su servicio de streaming, Disney+. Los nombres más prominentes en esta controversia son los de Bob Iger y Bob Chapek, actuales y anteriores CEO de la compañía, respectivamente.
La demanda, presentada por «Stourbridge Investments», sostiene que la empresa llevó a cabo un ‘esquema fraudulento’ para ocultar las pérdidas de Disney+ y hacer que las metas de crecimiento de suscriptores para 2024 parecieran alcanzables cuando no lo eran. Esta acción legal se produce después de que el último informe trimestral de Disney revelara pérdidas de más de 500 millones de dólares en su división de streaming.
La acusación se centra en la supuesta manipulación de costos y pérdidas relacionadas con el servicio de streaming. Según los informes, esta no es la primera vez que Disney enfrenta tales acusaciones. De hecho, problemas similares llevaron a la destitución de Bob Chapek como CEO a finales de 2022, y al regreso de Bob Iger al cargo.
Los inversores están pidiendo que se tomen todas las medidas necesarias para reformar y mejorar la gobernanza corporativa y procedimientos internos. Exigen que la compañía se adhiera a las leyes aplicables para proteger tanto a Disney como a sus accionistas de eventos dañinos similares en el futuro.
A pesar de las huelgas en curso de WGA y SAG-AFTRA, en las que Iger se ha convertido en la cara pública del lado corporativo, Disney espera obtener beneficios de su servicio de streaming para el año 2024. Sin embargo, esta demanda pone en duda la viabilidad de tales proyecciones y pone en juego la confianza de los inversores en la estrategia para su plataforma de streaming.
La demanda también detalla cómo la compañía cambió su enfoque hacia el streaming durante la pandemia, centralizando sus actividades de distribución y comercialización en la división Disney Media and Entertainment Distribution (DMED). Este cambio representó una «salida dramática» de la estructura de informes histórica de Disney y ha sido objeto de controversia dentro de la compañía.