Amazon ha presentado cuatro nuevos productos Echo: el «Echo Show 5» de nueva generación con un sistema de altavoces mejorado, un «Echo Show 5 Kids» rediseñado, una nueva generación de los «Echo Buds» y un nuevo altavoz llamado «Echo Pop». Todos estos dispositivos ya pueden reservarse a través de Amazon. El Echo Show y Echo Pop, empezarán a enviarse el 31 de mayo, y los Echo Buds el 7 de junio; aunque la disponibilidad en cada país puede variar.
De todos los nuevos equipos anunciados, el verdaderamente ‘nuevo’ es Echo Pop. Este destaca por un nuevo diseño, siendo ligeramente más pequeño que el Dot, lo que lo convierte en una gran opción para superficies en las que no hay mucho espacio, como repisas, alféizares y mesas de noche. Está disponible en ‘divertidos’ colores como Lavender Bloom y Midnight Tea, además de Charcoal y Glacier White. En la parte frontal lleva un altavoz direccional diseñado a medida para ofrecer un sonido completo, mientras que bajo la cubierta está el procesador Amazon AZ2 Neural Edge para modelos de voz que utilizan aprendizaje automático (machine learning) y que mejora la capacidad de respuesta de Alexa.
Viene con un router eero integrado, por lo que si tienes una red Wi-Fi eero, puedes usar el Echo Pop para añadir hasta mil pies cuadrados (casi 100 metros cuadrados) de cobertura. Y, como con otros dispositivos Echo, puedes utilizar Alexa para controlar tu hogar inteligente, leer audiolibros y hacerle preguntas.
Los precios anunciados por Amazon —para Estados Unidos— son:
- Echo Pop: $39.99 USD
- Echo Show 5: $89.99 USD
- Echo Show 5 Kids: $99.99 USD
- Echo Buds: $49.99 USD
Estos nuevos dispositivos también son compatible con el estándar «Matter», lo que significa que puedes emparejarlo con dispositivos inteligentes fabricados por empresas que no sean Amazon.
Recordemos que Matter es un nuevo estándar de conectividad abierto para dispositivos de hogar inteligente y del Internet de las cosas. Promete hacer que los dispositivos inteligentes funcionen entre sí, independientemente de la empresa que los fabrique, y que los dispositivos sigan siendo utilizables —e inteligentes— en tu red doméstica, incluso cuando no haya conexión a Internet disponible y que sus comunicaciones con otros equipos del hogar sean seguras.