Adobe, Apple, Google e Intel tendrán que cancelar 325 millones de dólares a un ex grupo de empleados de cada compañía por culpa de una demanda colectiva a estas empresas. Éstas fueron acusadas de limitar la competencia por medio de un pacto de fijar los salarios.
Los antiguos trabajadores aseguraron que estas compañías fijaban bajos salarios con el fin de limitar la competencia. El caso en su momento tuvo una importante relevancia pública, especialmente porque se demostró cómo opera Silicon Valley y la poca protección laboral en la que se encuentran los trabajadores.
Incluso dio pie a que se filtrara un correo electrónico de Steve Jobs al por aquel entonces Presidente Ejecutivo de Google, quejándose por esta situación.
En un principio los antiguos empleados habrían exigido un total de 9 mil millones de dólares a todas las empresas, pero luego de firmar un acuerdo la cifra se redujo a sólo 325 millones de la divisa norteamericana.