Ángel Jiménez, investigador del Instituto Sistemas Complejos de Ingeniería (ISCI), junto a expertos en la integración de biosensores con arquitectura de software del laboratorio Wesstlab, generaron un interesante y potente invento. Una pulsera que rastrea y evalúa constantemente a tu hijo.
La idea de este producto es satisfacer una de las más grandes necesidades de los padres: saber el estado de su hijo(a) cuando no pueden estar con ellos. Y con esto podrás medir la temperatura del menor, su pulso, la saturación de oxígeno en la sangre, además de un acelerómetro para medir movimiento, y un giroscopio para medir giros.
Detectando maltrato con la pulsera
Otro potencial uso del brazalete es la detección de un eventual maltrato físico. Este se logra evaluando los milisegundos después de que suceda un zamarreo. Con esto se activa una función que captura el audio del entorno del niño. Así, con esta información, los padres sabrán si su hijo ha sido víctima de violencia verbal.
Las señales de este dispositivo son captadas y enviadas a la nube para su procesamiento. En menos de cuatro segundos todas las señales son procesadas a través de algoritmos capaces de detectar movimientos extraños, como caídas o zamarreos. En estos casos, se envía inmediatamente una alarma o notificación al Smartphone del adulto responsable. Esta notificación puede incluir información extra, como audio, para complementar la información del entorno del menor.
Por ahora este producto no está disponible comercialmente, pero sí está en una fase de prototipo, tanto del dispositivo como de la aplicación para Smartphone. Ambos desarrollos están disponibles para realizar pruebas de laboratorio y así mejorar la inteligencia artificial del sistema.