Garmin apuesta por un nuevo reloj inteligente GPS en su cartera de dispositivos. Se trata del Forerunner 225, el primer reloj de la compañía capaz de medir la frecuencia cardíaca en la muñeca en tiempo real y sin necesidad de utilizar la banda externa que cumplía aquella función.
Este sensor que permitirá conocer los latidos por minuto, tiene la ventaja de ofrecer una lectura óptica de la frecuencia cardiaca a través de un dispositivo que emite una luz hacia la piel y evalúa el retorno de la misma. De esta forma se obtiene una medición más exacta de las pulsaciones permitiendo así controlar los entrenamientos con mayor precisión.
Un dato importante es que el Garmin Forerunner 225 incluye a esta nueva herramienta, la capacidad de medir la actividad diaria del usuario. De esta manera y al igual que sus versiones anteriores puede registrar pasos, distancias, calorías quemadas y la calidad del sueño sin necesidad de GPS activado, sólo con el acelerómetro integrado.
Otra característica de este reloj GPS es que incentiva a mantener al usuario en constante movimiento, mediante alertas por vibración cuando se está mucho tiempo inactivo. Además es sumergible al agua hasta 50 metros y cuenta con batería de hasta seis semanas en modo reloj con seguimiento de actividad diaria, y aproximadamente 6 horas con GPS y con el medidor de muñeca de frecuencia cardíaca.