Una actualización defectuosa de ciberseguridad ha causado grandes y graves interrupciones en bancos, aerolíneas y otras compañías a nivel mundial. Esta actualización, vinculada a «CrowdStrike», ha llevado a numerosos sistemas operativos Windows a presentar la pantalla azul de la muerte (a.k.a. BSOD en inglés).
El problema comenzó cuando una actualización de CrowdStrike a su software Falcon causó fallos críticos en sistemas basados en Windows en entornos empresariales. Esta falla obligó a los PC y servidores afectados a entrar en un bucle de arranque, inutilizando las máquinas. Empresas en todo el mundo, incluyendo aerolíneas como Delta y Frontier, y emisoras como Sky News, se vieron gravemente afectadas, teniendo que detener vuelos y emisiones.
En el caso de Chile, la aerolínea Latam confirmó que sus operaciones —hasta este momento— no se ha visto impactada tras esta afectación masiva a los PC con el sistema operativo de Microsoft.
La solución a la falla de CrowdStrike
Es importante comprender que el fallo no fue causado por Microsoft, sino por este tercero. Y aunque a este punto, CrowdStrike identificó y revirtió la actualización defectuosa, no pudo solucionar el problema en los dispositivos ya afectados. Por esto mismo, muchos han recurrido a iniciar Windows en modo seguro para eliminar el archivo «C-00000291*.sys» en el directorio «C:\Windows\System32\drivers\CrowdStrike» y así lograr funcionamiento normal.
George Kurtz, CEO de CrowdStrike, comentó en un post en X: «estamos trabajando activamente con los clientes afectados por un defecto encontrado en una sola actualización de contenido para hosts de Windows. Los hosts de Mac y Linux no están afectados. Esto no es un incidente de seguridad o un ciberataque. El problema ha sido identificado, aislado y se ha desplegado una solución».
Además de los problemas causados por la actualización, Microsoft también experimentó interrupciones en sus servicios Azure y Microsoft 365. Estas interrupciones no parecen estar directamente relacionadas con el problema de CrowdStrike, pero contribuyeron a la confusión general.