Según las Universidades de Würzburg y Nottingham-Trent, quienes en conjunto realizaron un estudio con Kaspersky, los hombres se demoraban sólo 21 segundos en volver a revisar su teléfono celular. Esto valida la increíble dependencia que tienen los varones al móvil.
Por otra parte, las mujeres esperaron 57 segundos antes de volver a mirar el equipo, en una prueba que puso a distintas personas en una sala de espera para poder obtener este tiempo promedio de volver a mirar el celular.
Asimismo, esta investigación demuestra que la compulsión por revisar constantemente nuestros teléfonos podría deberse al miedo de perderse algo por no estar en línea (FOMO, por sus siglas en inglés). Además, en una encuesta paralela, los participantes que utilizaban sus teléfonos con mayor intensidad admitieron tener mayor miedo a perderse información.
Hombres y mujeres desconectados con la realidad
Lo más interesante viene ahora: después de diez minutos se le preguntó a los participantes (hombres y mujeres) cuánto tiempo creían que habían estado sin utilizar sus teléfonos móviles. La mayoría afirmó que entre dos y tres minutos, demostrando la desconexión significativa entre la percepción y el comportamiento real.
Por otro lado, este estudio muestra que cuanto más usamos nuestros teléfonos, más nos estresamos. Pero, sorprendentemente, cuando a los encuestados se les preguntó sobre su felicidad, en general no hubo diferencias significativas entre los usuarios moderados y los frecuentes. En este sentido, el estrés causado por el uso del smartphone no parece tener una influencia importante en nuestro bienestar general sin importar el género.