Tal y como se los hemos venido diciendo, se acercan tiempos en que la tecnología estará 100% integrada a nosotros, de modo que ésta nos convierta en un ser más inteligente.
Es por ello que las compañías tecnológicas están cada vez más empeñadas en que cada dispositivo que nos rodea esté conectado a Internet, una tendencia conocida como «Internet de las cosas».
Aunque todo esto ha sido una evolución desde la invención del PC, los smartwatches fueron quizá la primera muestra visible de que el Internet de las cosas ya estaba aquí.
Luego vino Google y sus gafas de realidad aumentada, y ahora se trata de Sony.
Recientemente nos enteramos de que Sony ha solicitado en Estados Unidos la patente de una peluca inteligente que, de llegar a fabricarse, sería una peluca con diferentes tecnologías ocultas bajo una capa de «pelo de caballo, de humano, lana, plumas, pelo de yak o cualquier clase de material sintético».
Según explica Portaltic, el dispositivo iría cargado de sensores de captación de datos, como micrófono, GPS, cámara y hasta punteros láser.
En ese sentido, la peluca podría guiar a un invidente a trasladarse por una ciudad, o algo tan simple como ayudar a profesionales durante una presentación en una reunión.
El gadget además cuenta con la posibilidad de enviar señales al usuario mediante vibraciones y se conecta a dispositivos móviles u ordenadores mediante señales inalámbricas.