En el año 2009, Sennheiser construyó el audífono HD800 -exclusivos para la reproducción del sonido en alta fidelidad- de tamaño superior al habitual para potenciar los graves. A estos, la compañía simplemente dice que son: «los mejores audífonos del mundo«. Su construcción utiliza oro, plata, cobre, teflón, acero inoxidable y un plástico especial utilizado en la industria aeronáutica; la empresa llevó a cabo su propuesta.
Los auriculares cuentan con un montaje exclusivo para las cápsulas con unos transductores que tienen por finalidad conseguir que las ondas sonoras se dirijan al oído formando un ligero ángulo- de 45 grados- Así, gracias a la disposición de sus transductores y de una membrana en forma de anillo, arroja una vibración que simula el mismo efecto espacial que se produce escuchar el audio procedente de unos altavoces, pero con una pureza y un realismo incomparable. Para garantizar comodidad, se incorporaron almohadillas japonesas de Alcantara, un componente de especial suavidad para la piel y muy fácil de limpiar.
Los cuatro cables incorporados en el periférico, destacan por haber sido fabricados en cobre y estar bañados en plata, además de aislados con teflón para protegerlos de las perturbaciones electromagnéticas. Y sus adaptadores de audio (alta precisión y jack de 6,3 mm) están enchapados en oro con el fin de ofrecer un óptimo contacto
El producto tiene un precio que bordea los $1.500 USD; ¿Los pagarías si estás buscando una «suprema calidad» de audio?