El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmó una ley que podría llevar a la prohibición de TikTok en todo el país, aumentando la amenaza para las operaciones de la compañía en suelo norteamericano. Esta legislación se aprobó como parte de un paquete de ayuda extranjera destinado a apoyar a Israel y Ucrania, recibiendo la aprobación de la Cámara el sábado y del Senado el martes.
Esta es la amenaza más seria para la red social desde que los funcionarios estadounidenses comenzaron a expresar preocupaciones sobre la aplicación en 2020. Según la nueva ley, TikTok debe encontrar un nuevo propietario en los próximos meses o enfrentar una prohibición total en los Estados Unidos.
La ley firmada por Biden otorga a ByteDance, la empresa matriz china de TikTok, 270 días para vender su plataforma social. Si no lo hace, TikTok sería prohibido en las tiendas de Apps de Estados Unidos y en los servicios de alojamiento en Internet (hosting) que lo respaldan. Esto restringiría efectivamente las nuevas descargas de la aplicación y la interacción con su contenido. La decisión de Biden de firmar la ley establece el plazo para una venta el 19 de enero de 2025. Sin embargo, bajo la legislación, Biden podría extender el plazo otros 90 días si determina que la compañía ha progresado hacia una venta, dando a TikTok potencialmente hasta un año antes de enfrentar una prohibición.
La plataforma —por su parte— está amenazando con tomar acciones legales para oponerse a la ley. En un video publicado en TikTok, el CEO de la compañía, Shou Chew, dijo a los usuarios: «Estén seguros: no vamos a ninguna parte». «Confiamos y seguiremos luchando por sus derechos en los tribunales», agregó. «Los hechos y la Constitución están de nuestro lado y esperamos prevalecer». Además, un portavoz de TikTok calificó la ley como «inconstitucional» y dijo que «devastaría» a los 170 millones de usuarios de la plataforma en Estados Unidos y a los 7 millones de negocios que operan en la aplicación.
Un desafío judicial podría llevar a que la medida se bloquee temporalmente mientras se resuelve el litigio, probablemente durante varios años. Pero si un tribunal se niega a conceder una orden judicial temporal, TikTok podría tener que apresurarse para cumplir con la ley.
En un memorando del sábado, un alto ejecutivo de TikTok escribió a los empleados que esto sería el «comienzo, no el fin» de un largo proceso para desafiar lo que la compañía llama una legislación inconstitucional que censura los derechos de expresión de los estadounidenses y que perjudicaría a las pequeñas empresas que dependen de la aplicación. En marzo, Chew prometió continuar luchando, «incluyendo (mediante) el ejercicio de nuestros derechos legales».