John Ewer es investigador del Centro Interdisciplinario de Neurociencias de la Universidad de Valparaíso y un ‘especialista en relojes biológicos’, según la propia casa de estudios. Él entregó sus recomendaciones para enfrentar los cambios desde el horario de verano al horario de invierno, y no tener complejidades con el sueño y el sistema inmunitario.
Ewer menciona que si con el cambio de horario, pasó de amanecer poco antes de las 8:00 hrs. a previo las 7:00 hrs., este suceso fija el inicio del del día para tu cuerpo y es importante considerar ese suceso natural. El especialista dice que si tu día biológico comienza antes, entonces podrás dormirte más temprano y por lo tanto dormirás más.
Los beneficios comenzarán el mismo día que se cambia al horario de invierno, porque esa primera noche tendrás la posibilidad de dormir una hora más. En el caso específico de Chile, recordemos que se retrocede por una hora el reloj.
Cuidando al sistema inmune
Si duermes menos, tienes un sistema inmune más debilitado. Eso se sabe hace mucho tiempo, pero con el contexto de la pandemia muchas personas han sufrido fuertes consecuencias emocionales. Incluso entre los propios contagiados con COVID-19, un estudio demostró que los que duermen bien, tienen casi una nula posibilidad de terminar hospitalizado en una Unidad de Cuidados Intensivos.
Dormir mal afecta a la inmunidad, el ánimo y está asociado también a trastornos depresivos. Hay que tratar de dormir lo mejor posible y una manera de mejorar el sueño es que amanezca más temprano, porque así el día se acaba antes para tu cuerpo y puedes dormir más durante la noche, agregó John Ewer.
El horario de invierno y las pantallas
El uso de la luz artificial dentro de nuestras casas o el quedarnos viendo las pantallas de celular, computador o tablets nos hace perder horas de sueño vitales para nuestra salud.
«La vida con luz artificial tiene un efecto bien nocivo en nuestro sueño, inhibe la producción de melatonina (la hormona del sueño), retrasando la entrada al sueño».
John Ewer.
El investigador aconseja reducir la exposición a luz artificial durante la noche y exponerse a la luz del sol en la mañana. De hecho, es importante que sea la luz del sol ya que es muy fuerte y exponerse una media hora en la mañana es muy bueno.
La idea es encontrarse con la luz del sol en una terraza, jardín, donde sea posible, porque permitirá adelantar nuestro reloj biológico. Y cuando llegue la noche, evitar la luz artificial directa, sobre todo de pantallas y celulares. ¿Por qué? Debido a que estas producen una luz con un componente azul importante y ello afecta mucho su reloj biológico. Así podrás dormir antes y, por lo tanto, por más tiempo.