La empresa de seguridad informática, ESET, ha estado trabajando para informar sobre los cuidados que hay que tener en Internet, y en esta oportunidad -específicamente- observando la actividad en la plataforma de videos «Twitch». Considerando que en la actualidad ya tiene más de dos millones de espectadores diarios y más de 6 millones de streamers que están publicando contenido cada mes.
Pero, ¿en qué debemos fijarnos para tener una ‘sana’ relación con Twitch? Primero en los límites que la propia plataforma presenta. Consideremos que, independiente a sus contenidos, no es un servicio para niños pequeños. La edad mínima para crear una cuenta es de 13 años con supervisión de adultos, y en este caso el problema es que -al igual que en otras plataformas- se puede introducir información falsa.
Tener un perfil podría permitirle a un pequeño realizar sus propias transmisiones públicas, dejando la opción que cualquiera pueda contactar a través del chat o por mensajes directos (a.k.a. Whispers).
De acuerdo a una investigación del medio Wired, varios de los(as) niño(as) menores de 13 años que fueron identificados en la plataforma, y que realizaban transmisiones, recibían por estos medios mensajes inapropiados de participantes anónimos. En ocasiones solicitando datos de contacto como el número de WhatsApp u otros perfiles en redes sociales.
Por otro lado están los posibles gastos que pueden existir dentro del mismo servicio. Es el caso de la compra de ‘Bits’, la moneda de Twitch, que los usuarios pueden adquirir para apoyar a sus streamers favoritos, por medio de donaciones o mediante suscripciones pagas para acceder a contenido exclusivo. ESET recomienda conocer el uso que los niños hacen de la plataforma para evitar estafas, en ocasiones incitadas por otros usuarios a través del chat, o gastos indeseados, a veces promovidos incluso por los propios streamers, aprovechando el fanatismo que despiertan.
Lamentablemente, en cuanto a control parental, no existe una configuración específica en Twitch y tampoco es posible bloquear transmisiones ni limitar el tiempo de uso desde la plataforma. Por lo mismo la supervisión y la comunicación entre los chicos y adultos es importante.