El diseñador jefe de Apple, Jony Ive, deja la compañía con un tremendo legado de años de trabajo y productos icónicos que han sido lo más potente de la compañía en más de dos década. Incluyendo al famosísimo iPhone.
Ive deja la compañía no para sumarse a la competencia. Él se retira para formar su propia compañía de diseño de la cual Apple será uno de sus principales clientes. Por lo mismo no es un adiós definitivo, sino una nueva perspectiva para hacer negocios.
En un comunicado, Apple aclara que la partida de Ive será a finales de ese año y que todo se reduce a la búsqueda de proyectos personales, dejando en claro que no es un tema con -o en contra- de la compañía.
«Jony fue una figura singular en el diseño mundial y su rol en el renacimiento de Apple no puede ser exagerado. Desde el innovador iMac de 1998, hacia el iPhone, y la ambición sin precedentes del Apple Park, donde ha puesto tanta de su energía y cuidado.»
(Tim Cook, CEO de Apple)
Por ahora los actuales diseñadores líderes en la compañía, Evans Hankey y Alan Dye, reportarán directamente a Jeff Williams, COO de Apple. Y este último continuará informado a Tim Cook con todo lo que su equipo de diseñadores hagan.
Jony Ive reconoce la calidad del equipo de trabajo que quedará en la compañía, dedicándoles unas palabras de confianza. Incluso afirmando que continuarán siendo sus amigos más cercanos, independiente que ya no esté en los pasillos de Apple.