Ha sido un décimo aniversario de la familia «Galaxy S» de locos. Samsung no sólo presentó a los nuevos buque insignia, sino también los acompañó de otros dispositivos inteligentes que complementan la experiencia de estas máquinas.
Aún así pudimos pasear un rato con un Galaxy S10+ y quisimos poner a prueba la calidad de su cámara en una configuración tradicional, sin manipular configuraciones y utilizando todo por defecto.
La idea es tener una primera impresión de la experiencia de su cámara, como si cualquier persona tendría el equipo en sus manos.
Y aprovechando que estábamos con un iPhone Xs Max, también quisimos comparar la calidad de sus fotos. Insisto, ambos en sus modos por defecto y automáticos, ya que claramente por configuración manual, Galaxy S10+ puede dar mucho más que el teléfono de Apple.
Video en el Galaxy S10+
Lo primero que vamos a hacer es ver la calidad de video. Lo máximo que puede rendir el nuevo Galaxy S10+ es con un registro 4K (3840 x 2160) y con un peso de 522 MB por minuto de video.
Miren el clip a continuación:
Fotos en el Galaxy S10+
Como les comentaba con anterioridad, aprovechamos de fotografiar con el nuevo equipo, pero comparando la calidad de imagen con un iPhone Xs Max.
Vean los resultados en distintas situaciones de día (clic en la imagen para ver a tamaño completo y original):
En una revisión rápida podríamos decir que la imagen con el S10+ tiene más presencia de sombras y saturación de color que la del iPhone, aunque ambos capturan bien la luz y se entiende la composición completa.
Ahora veamos el detalle para ver la nitidez de la misma fotografía:
Definitivamente vemos líneas más definidas con el S10+ en un general de objetos, pero eso no significa que sea mejor. A diferencia del auto, que sí entrega una línea más coherente, en cosas más pequeñas simplemente pareciera que pintara la imagen.
Fíjense en las palomas. Para mí son más comprensibles -visualmente- en el iPhone Xs Max que para la reproducción del nuevo teléfono de Samsung.
Miremos esta otra imagen en detalle (clic para agrandar):
En una primera impresión, pareciera que hay poca diferencia. Y la verdad es que viéndola completa, más allá de un tema en el tono de color y contraste (cuestión que se puede corregir a gusto de cada uno), no hay mucho qué decir.
La diferencia más notaria la podemos apreciar si vemos el detalle al 100%. Definitivamente y únicamente por nitidez, Samsung se lleva el trofeo.
Ahora vemos una imagen con zoom digital a todo dar.
Este resultado es tan absurdamente distinto (entre cada imagen), que prefiero dar un poco de contexto. Ambas son fotografías con un contraste de luz que viene por el atardecer del sol que cae a la izquierda de la foto.
Aunque reconozcámoslo. El iPhone Xs Max no supo qué hacer acá.
Por ahora, publicaremos esas fotografías. En San Francisco aún no cae la noche y tenemos muchas horas por delante para seguir haciendo comparaciones en baja luz.
A raíz de lo mismo, continuaremos actualizando esta publicación o generando otras nuevas que complementen la calidad fotográfica y de video en los nuevos Galaxy S10+ y (probablemente) sus versiones menores.
¡Atentos!