La revista Science en su actual edición, decidió presentar un nuevo estudio. En esta oportunidad se enfrentó al fenómeno de las noticias falsas y como la gente engancha más con ellas que las verdaderas. Eso sí, observándolo desde el punto de vista en Twitter.
Históricamente la razón de peso que se indicaba como la culpable de la viralización de noticias falsas eran los bots. Pues no, no es culpa de perfiles automatizados, sino de gente real.
Estudiando las noticias falsas
Science abarcó tweets entre 2006 y 2017, analizando más de 126.000 rumores. De ese total, se desglosa que esas noticias fueron tuiteadas por aproximadamente 3 millones de personas. ¿La conclusión? Los tweets sobre noticias reales raramente alcanzaban a más de 1.000 personas. En cambio las falsas se extendían entre 1.000 y 100.000 personas.
Peor aún, el mismo estudio separó a los bots y las personas reales. Los perfiles autómatas publicaban por igual una cantidad de noticias reales y falsas, para despistar. Por otro lado, las personas reales, publicaban más noticias falsas.
¿Qué está pasando? La propagación de las noticias falsas es -básicamente- porque sorprenden más. Estas historias generan miedo, indignación, sorpresa y otras sensaciones, cuestión que hace verse más novedoso para las personas.
Finalmente el objetivo del estudio no es validar si una plataforma social difunde más o menos noticias falsas. La idea es analizar este tipo de sucesos para ayudar a reducir la mala práctica.