La Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos rechazó la apelación que había interpuesto Google en un juicio, por violar las leyes de privacidad. Con esto deberá enfrentar una decena de juicios civiles en su contra.
Google reconoció, a mediados de 2010, haber recogido datos de conexiones Wi-Fi sin encriptar, proceso que le ayudo a conocer direcciones de correo electrónico, datos de navegación, contraseñas y contactos.
El acto reconocido por la empresa de Mountain View infringe lo establecido la ley de privacidad de las personas y de telecomunicaciones de Estados Unidos, por lo que Google podría llegar a pagar millones de dólares a los afectados.
De igual forma, en la compañía anunciaron que dispondrán de más de 7 millones de dólares para esclarecer lo ocurrido y sancionar, en caso de que los haya, a los culpables y compensar a las posibles víctimas.