Chang’e-3 llegó y China lo logró. Por primera vez, en su historia espacial, esta potencia mundial llevó fuera de nuestro planeta un vehículo manejado remotamente a nuestro satélite natural. Este suceso no ocurría hace 37 años y ubica al país asiático como el tercero del mundo en lograrlo. Los primeros fueron Estados Unidos y la ex Unión Soviética.
La sonda se posó hoy en el cráter lunar Sinus Iridum, en un viaje que duró un aproximadamente 12 días. Esta misión lleva consigo a Yutu, un explorador que comenzará a moverse sobre la superficie lunar con el fin de iniciar una exploración científica de nuestra luna que duraría tres meses.
Recordemos que Chang’e-3 fue impulsado por el cohete Larga Marcha 3B, cuyo peso rondaba -en totalidad- las 3,78 toneladas. Además la salida de la sonda provocó algunos destrozos en casas de habitantes chinos, al caer los restos de este cohete sobre ellos. Situación que por suerte, no conllevo ninguna pérdida humana.