Irán es uno de los países considerados “enemigos de Internet”. ¿Por qué? Básicamente porque la censuran. Ellos se suman a un listado de países -del oriente- como Corea del Norte, Arabia Saudí, China, Uzbekistán, Vietnam, Siria, entre otros, que bajo la misma regla, coartan Internet a sus habitantes.
Allá no existe Facebook, Twitter, Google y ningún tipo de Blog. O sea: Medios de expresión personales = “0” / Gobierno de Irán = “1000”, pero todo esto tiene un trasfondo bastante peculiar.
Irán ha justificado su censura, no porque quiera “cortarles las manos”, digitalmente a sus oriundos, más bien por una cuestión que occidente es una mala influencia. Sí, para ellos (en específico en voz de Reza Taguipur, Ministro de Comunicaciones y Tecnología de la Información iraní) los países de occidente, con Estados Unidos a la cabeza, usan Internet para espiar y extender la corrupción en el mundo. Entonces ellos claramente no están a favor.
Google es considerado el instrumento máximo de espionaje y para que decir de otros portales, donde la policía iraní los encuentra como verdaderos métodos para promover la producción, venta y consumo de drogas dentro del país. O sea todo lo malo es culpa de Internet.
Bueno, pero, ¿es muy descabellado pensar eso? La verdad es que no. Es conocido el espionaje en Internet. Se sabe de técnicas de monitoreo en redes sociales, ya sea para Marketing o cuestiones gubernamentales. En eso no hay engaño. Retrocedamos un mes atrás, ¿La captura de los fundadores de MegaUpload? Y más atrás con todo lo que Wikileaks nos ha proveído.
El problema radica en que Irán predica, pero no practica. Crea organismos especiales para espiar domésticamente e internacionalmente la Internet, entonces -a la larga- cae en un mismo fisgoneo hacia lo que haga, o no, su gente en Internet. Fuera de cortarles los accesos a medios de expresión en línea de participación global.
Irán ha tenido sus propias revoluciones políticas a través de “la red de redes”, en una forma clandestina a contar del 2009, con la creación de Blogs por consecuencia de la falta de prensa extranjera en el país. Imaginen que las mujeres artistas iraníes (especialmente cantantes), como no tienen “derecho a voz”, han usado Internet para darse a conocer y después simplemente irse de ahí, ya que peligra su carrera y hasta su propia integridad física por ser una república islámica.
Fuera de todo lo expuesto, Irán quiere hacer su propia Internet. Una que sea para el pueblo, libre de occidente y con variantes a todos los servicios que ya existen como Yahoo!, Google o el mismo Hotmail. ¿La idea? Tener el control absoluto de la información. Ojo que esto no cortaría a la Internet que todos conocemos, ya que el mismo Gobierno, Bancos y algunas compañías seguirán accediendo a esta. Ni tontos, con todo el tema comercial y la globalización que exclusivamente sucede en la Internet corrupta de occidente.
Pero, ¿suena muy loco tener una Internet propia? Otra vez la respuesta es “no”. Muchos han pensado en hacer distintas redes para propósitos en particular. Por ejemplo: Internet para la educación en colegios, Internet para el comercio y así muchas otras.
El detalle es que Irán tiene dos problemas graves que quiere resolver con esto: 1) Dominar la información que entre y salga del país para el pueblo. En esto estoy de acuerdo con los dichos de Carl Bildt (Ministro de Asuntos Exteriores de Suecia) que se refirió al tema como “no debes hacer digitalmente lo que tampoco no está permitido en la vida real”, con eso remató que “Hay cosas que no podemos hacer, como robar. Que esto infringe la libertad de los individuos, algunos podrían argumentar que sí, pero las limitaciones están para proteger las libertades de otros”.
Ahora el segundo aprieto y que podría darle a favor, solo un poco, a Irán es: 2) La seguridad informática industrial y comercial del país. Irán –este último tiempo- ha sido bastante atacada por virus de construcción muy compleja como Stuxnet o Duqu. Estos, en un inicio, atacaron directamente a plantas nucleares, industrias que controlan viaductos y otras empresas del país, lo que dejó inquieta a la comunidad mundial ya que Stuxnet puede recoger datos de una máquina y -más encima- hacerse de ella completamente.
¿Qué hacer? ¿Cómo buscar el equilibrio de la censura si tenemos una red insegura? ¿Cómo no ser tan inicuo para utilizar esta inseguridad contra tu gente y usarlo de pretexto para “robarte” identidad digital?
¿Y ahora quién podrá defendernos? O mejor dicho, ¿quién podrá defender la libre expresión en Irán?