Aunque no lo crean, la Ley de Velocidades mínimas garantizadas de acceso a Internet debe ser una de las eventualidades en telecomunicaciones más importantes del 2017 para Chile. Este proyecto de ley que será votado en el Senado en las próximas semanas, traerá transparencia a lo que venden los operadores de Internet.
Principalmente la idea es establecer y obligar a estas compañías a explicitar la oferta y eficacia de los servicios. Así los clientes de las empresas proveedoras cuenten con información transparente, para así asegurar que los usuarios tengan claridad respecto a las prestaciones de los servicios que contraten.
Por ejemplo, ¿has contratado un Internet que dice 200 Mbps, pero sólo descargas a 30 Mbps? Bueno, ese limbo de lo teórico y práctico se acabó. Ahora en los contratos y publicidad, la velocidad promedio de acceso y navegación deberá estar especificado.
Más beneficios de la Ley de Velocidades
La iniciativa contempla, además, una batería reglamentaria para el cumplimiento de la oferta y entrega de servicio, para que pueda ser comercializado como Internet de banda ancha. La subsecretaría de telecomunicaciones (SUBTEL) será la encargada de velar por la validación de la norma y proteger los intereses de los usuarios con una fiscalización permanente.
Las modificaciones al cuerpo legal consideran la incorporación de tres mecanismos de verificación del cumplimiento de las exigencias de velocidades ofertadas, a través de mediciones individuales, mediciones por un tercero independiente y la fiscalización de SUBTEL.
El cotejo se aplicará en los tramos horarios de mayor y menor congestión o tráfico, y los operadores deberán poner a disposición de los usuarios un sistema de medición, cuyos resultados habilitarán a éstos a solicitar la reparación o restitución del servicio, así como una compensación por el tiempo en que el servicio no se hubiese encontrado disponible o haya funcionado de forma defectuosa.