Un estudio de la Universidad Brigham Young (EE.UU.) analizó qué sucede cuando alguien se comunica a través de un mensaje digital, ya sea en una conversación de Whatsapp, Facebook, un SMS o cualquier otro soporte.
La investigación concluyó que se puede saber que la otra persona miente cuando tarda más en responder, edita y recibe el mensaje varias veces y, generalmente, suele ser más corto de lo normal.
Una persona que miente por medio de un SMS -o en otro soporte- demora un 10% más que otro usuario que dice la verdad.
Tom Meservy, profesor encargado de la investigación, aseguró que las conversaciones virtuales eran espacios ideales para las mentiras:
«Las conversaciones digitales son un terreno que fomenta el engaño, porque las personas pueden disimular y hacer que sus mensajes parezcan creíbles».