Un exalumno del Doctorado en Ciencias del Ejercicio de la Universidad Finis Terrae presentó una querella por presunta experimentación humana y ejercicio ilegal de la profesión contra Hermann Zbinden Foncea, profesor de educación física y entonces director de postgrados e investigación en la Escuela de Kinesiología. El denunciante aseguró haber sufrido una biopsia muscular realizada por el docente en un gimnasio del plantel, lo que le provocó intenso dolor, desmayos y secuelas físicas y psicológicas.
Según un reportaje de T13, el procedimiento se habría efectuado sin condiciones médicas ni autorización profesional. En un registro de audio incorporado a la causa, se escucha al estudiante quejarse mientras Zbinden da instrucciones. Testigos sostienen que el instrumento utilizado alcanzó el hueso del afectado y que el joven debió amordazarse para resistir el dolor.
Biopsias irregulares dentro de Finis Terrae
La denuncia indica que el profesor seleccionó a los estudiantes bajo un criterio arbitrario, preguntando quiénes no se habían sometido antes a una biopsia. Varios participantes declararon que temían represalias académicas si se negaban a colaborar, lo que cuestiona el carácter de ‘voluntario’ de los procedimientos. Un exencargado de laboratorio afirmó que las intervenciones se realizaban a primera hora de la mañana, cuando casi no había personal en la universidad, y describió el proceso como «hecho bajo la mesa».
Tras el procedimiento, el alumno perdió el conocimiento por el dolor. Horas después, Zbinden habría regresado y comentado: «qué bueno que le pasó a este y no a alguien externo de la universidad», en referencia a evitar una denuncia pública.
La defensa del profesor sostiene que no hubo delito y que las biopsias se realizaron de manera voluntaria, con participación de médicos y en el marco de actividades docentes. Sin embargo, testigos aseguran que el académico dirigía y participaba directamente en los procedimientos. La querella lo acusa de ejercicio ilegal de la medicina, lesiones y experimentación humana sin consentimiento válido.
La Universidad Finis Terrae informó que el docente fue removido de su cargo directivo y quedó inhabilitado para ocupar funciones académicas de responsabilidad, mientras continúa una investigación interna sobre los hechos.