Un estudiante de Massachusetts, en Estados Unidos, demandó a su colegio tras ser castigado por el uso de inteligencia artificial (IA) en un proyecto. La familia del joven, identificado en la demanda como RNH, llevó a cabo una acción legal al considerar que la sanción era injusta, ya que el colegio no tenía una política clara sobre el uso de IA. El incidente —según la acusación— ha generado repercusiones en su vida académica, afectando su proceso de admisión a reconocidas universidades del país.
El relato de los padres, Jennifer y Dale Harris, indican que RNH fue acusado de violar las normas de integridad académica por utilizar IA en una tarea de historia, siendo este un destacado estudiante y deportista en su colegio, el Hingham High School. Además, la madre es escritora y su padre un profesor y están al tanto de lo que significa vivir en un momento del ‘boom’ de la IA generativa.
RNH habría usado la herramienta únicamente para investigar y organizar ideas, pero no para redactar el trabajo final. A pesar de ello, fue castigado con la imposición de una detención escolar y una calificación baja en la asignatura, lo que además le impidió ser seleccionado para la National Honor Society (NHS).
Poca claridad sobre IA en el colegio
La demanda federal argumenta que la sanción es desproporcionada y que el colegio no cuenta con reglas específicas sobre el uso de inteligencia artificial. En el documento judicial, los Harris solicitan que se elimine la nota negativa del expediente académico de su hijo y se corrija la calificación de la tarea en cuestión. Además, exigen que el colegio incluya de manera retroactiva al estudiante en la NHS.
También se menciona que el manual estudiantil del Hingham High School incluye referencias simples sobre la IA, pero no establece con claridad cómo debe tratarse el uso de estas herramientas en trabajos académicos. El colegio, por su parte, defendió la medida, afirmando que la sanción fue relativamente leve y acorde con las normas existentes, aunque admite que el tema de la IA no está completamente regulado.
La controversia llevó a que los padres exijan que el colegio implemente una capacitación adecuada para maestros y estudiantes sobre el uso de la inteligencia artificial en el ámbito educativo, sobre todo considerando que sostienen que la institución académica no tenía políticas claras en el momento de la acusación y posterior sanción.