La Comisión Europea ha reimpuesto una multa de 376 millones de euros a Intel, el gigante de los microprocesadores, por prácticas anticompetitivas que datan de hace casi dos décadas. Esta decisión surge después de que el Tribunal General de la UE anulara parcialmente en 2022 una multa inicial de 1.06 mil millones de euros que la Comisión había impuesto a Intel en 2009.
El conflicto se centra en las acusaciones de que Intel abusó de su posición dominante en el mercado global de microprocesadores x86 con una estrategia para excluir a rivales utilizando rebajas y restricciones de ventas. En particular, se acusó a Intel de bloquear a su rival Advanced Micro Devices (AMD). La multa original de 2009 se basó en prácticas llevadas a cabo entre noviembre de 2002 y diciembre de 2006, cuando Intel pagó a empresas como HP, Acer y Lenovo para detener o retrasar productos rivales.
El Tribunal General de la UE, con sede en Luxemburgo, acordó con la Comisión Europea que Intel había excluido ilegalmente a rivales del mercado. Sin embargo, el tribunal desestimó el hallazgo de la Comisión de que las rebajas otorgadas por Intel a los fabricantes de computadoras habían distorsionado la competencia. En su nueva decisión, la Comisión indicó que la multa se basaba ahora en pagos realizados por Intel entre 2002 y 2006 a fabricantes de computadoras para detener o retrasar el lanzamiento de productos específicos que contenían CPUs x86 de la competencia.
La Comisión Europea declaró: «El Tribunal General confirmó que las restricciones flagrantes de Intel equivalían a un abuso de posición dominante en el mercado según las normas de competencia de la UE».
Intel, por su parte, ha expresado que está evaluando sus opciones y analizando la decisión y el monto de la multa para determinar los posibles fundamentos y perspectivas de éxito de una apelación ante los Tribunales Europeos. Es relevante mencionar que la compañía actualmente está esperando la aprobación de la Comisión para recibir casi 10 mil millones de euros en subsidios estatales alemanes para construir una instalación de fabricación de chips en Alemania.