Sin especificar una cifra exacta por la transacción, hoy nos enteramos que Uber sacó la billetera. ¿Cuál fue su propósito? Comprar ‘Jump’, una empresa dedicada al arriendo de bicicletas eléctricas.
Jump es una startup con sede en Nueva York y al parecer habría recibido más de 100 millones de dólares por esta otra empresa de tecnología en transportes. La idea es ‘expandir su portafolio de servicios.
Eso sí, Uber desde enero que arrancó un piloto de bicicletas eléctricas en San Francisco con Jump. Ahora, con esta adquisición definitiva, dan un paso importante para expandir su servicio dentro y fuera de los Estados Unidos.
Aunque nada está claro, por ahora.
El negocio de las bicicletas
En un post esta mañana, Uber confirmó el acuerdo convenido con Jump Bikes. Este movimiento sería la primera compra desde que Dara Khosrowshahi asumió el puesto como jefe supremo de la compañía (agosto 2017).
Cabe destacar que Jump es un servicio que permite arrendar bicicletas que se encuentran repartidas por la ciudad. Estas cuentan con un candado electrónico que se desbloquea a través de una App. Y cuando termines de usarla, pagas el tiempo que la tuviste contigo.
La startup también publicó sobre su unión con Uber, aclarando que los usuarios pueden seguir utilizando la aplicación. Todo esto independiente a la compra.
Lo nuevo es que ahora, en San Francisco, los usuarios de Uber pueden pedir bicicletas Jump desde su App. Sin la necesidad descargar o usar otra paralelamente.