Gabriel Licina y su compañero Jeffrey Tibbetts son los autores de un documento que valida la investigación de cómo amplificar la luz en la visión. Con esto, siendo investigadores independientes, han logrado inyectar exitosamente una solución especial en los ojos que permite distinguir objetos en la oscuridad.
Tanto Licina como Tibbetts indican que el documento publicado tiene sólo un propósito informativo y que el incremento de luz puede afectar la estructura celular del ojo si se trabaja incorrectamente con algunos de los materiales utilizados en la mezcla.
Ambos investigadores se hacen llamar «Science for the Masses», formando un grupo de profesionales en materias de la salud totalmente independiente a cualquier universidad, escuela científica o agencia gubernamental. Lo más importante es que cada investigación realizada por ellos, es publicada gratuitamente bajo licencias libres como Creative Commons.
Logrando la visión nocturna
Estos ‘biohackers’ -por así llamarlos- lograron la visión nocturna humana utilizando una sustancia llamada Clorina e6, la cual ha sido utilizada por años en el tratamiento de pacientes con cáncer. Esta se encuentra en un pez de aguas profundas y fue probada directamente en Licina, quien sirvió de conejillo de indias para este descubrimiento.
Al cabo de dos horas, pudieron notar los efectos de Clorina e6 incrementando constantemente, permitiéndole a Gabriel Licina identificar objetos en la oscuridad a una distancia de 50 metros. Eso sí, siempre protegiéndose los ojos con filtros de luz, tanto al principio como al final del experimento.
En Science for the Masses esperan seguir explorando esta tecnología para así conocer sus límites y posibles aplicaciones, como en la milicia del futuro.