¿Qué nos hace distintos? ¿Qué nos diferencia de nuestros vecinos, de nuestros amigos o de gente que vive en países lejanos?
Desde hace años sabemos que existen diferencias genéticas entre distintas poblaciones humanas que contribuyen a su aspecto y a una diferente susceptibilidad a las enfermedades, pero un estudio liderado por el Instituto de Investigaciones Biomédicas de Bellvitge y publicado por Sinc describe que también somos distintos debido al epigenoma. Es decir, no solo existen diferencias marcadas por el ADN (genoma) sino también por la distinta regulación de ese ADN (epigenoma).
“Hemos estudiado los epigenomas de trescientos individuos sanos de tres grandes poblaciones humanas (Caucasianos de Estados Unidos, Asiáticos de la etnia Han de la China y Africanos Subsaharianos) y hemos encontrado diferencias epigenéticas que permiten identificar cada grupo de humanos”, explica Manel Esteller, director del Programa de Epigenética y Biología del Cáncer del Instituto de Investigaciones Biomédicas de Bellvitge.
Según el responsable del proyecto, existen genes que se encuentran más o menos activos (debido a distintos niveles de la marca epigenética denominada metilación del ADN) según el grupo poblacional estudiado. Los genes diana de estas diferencias entre humanos se encuentran en todas las vías celulares, pero cabe destacar aquellos relacionados con la pigmentación de la piel y la diferente resistencia a infecciones debidas a diversos microorganismos patógenos como los virus (Hepatitis B y HIV) y bacterias (Shigella y Escherichia coli).
«Este último hallazgo contribuiría a explicar la distinta tendencia a desarrollar una enfermedad entre personas de diferente origen geográfico”, añade el experto.
El descubrimiento tiene importantes repercusiones para explicar la riqueza y diversidad de las distintas poblaciones humanas que ahora ya no pueden ser solo atribuidas a un distinto genoma, sino también a un distinto epigenoma.
La rapidez y reversabilidad de los cambios epigenéticos en el genoma podría explicar además cómo se producen los cambios necesarios en nuestras células y tejidos cuando poblaciones migran de un territorio a otro.