Según datos obtenidos por Ovum, el pasado año (2015) terminó con más de 1.000 millones de conexiones «Long Term Evolution» (LTE por su sigla en inglés) en todo el mundo. Eso sí, teniendo a América del Norte como el líder en cantidad de conexiones LTE globales, alcanzando 237 millones de toda la torta. Es decir, abarca más de la mitad o el 54% de todas las conexiones móviles de la región.
Estos datos se comparan con los próximos mercados regionales líderes del mundo: Europa Occidental y Oceanía y Asia-Pacífico, ambos con una participación de mercado de LTE del 24%. La penetración de LTE en los Estados Unidos se encuentra al 65% conforme a la población del país, que asciende aproximadamente a 362 millones de habitantes.
LTE en Latinoamérica
América Latina fue la región del mundo que brilló hacia el término de 2015, con 304% de incremento en el número de conexiones Long Term Evolution de 2014 a 2015. La segunda tasa de crecimiento más alta después de Asia Central y del Sur. Sin duda, Brasil realizó el mayor aporte al crecimiento de LTE en la región con más de 7 millones de suscripciones netas; en otras palabras, casi la mitad de las suscripciones netas totales de LTE de toda la región en el último cuarto del 2015.
El crecimiento de las conexiones Long Term Evolution en América latina casi se cuadruplicó de 13 millones de conexiones LTE hacia el término de 2014 a 54 millones al término de 2015. Este incremento se debe a las diversas convocatorias a licitación del espectro en la región, lo que les permitió a los proveedores de servicio ofrecer servicios de Long Term Evolution a sus clientes. Por primera vez, las conexiones HSPA de banda ancha móvil superaron a las GSM; HSPA cuenta actualmente con 325 millones de conexiones y las GSM cayeron a 317 millones.
Finalmente, y al rededor del mundo, se está desplegando LTE en 480 redes de 157 países. Asimismo, crece el ritmo de LTE-Advanced globalmente. Hoy, 117 redes de 57 países ya desplegaron la tecnología, más del doble de las 54 redes en 35 países al término de 2014.