Según los encargados legales de Google, la compañía sólo eliminará resultados de búsquedas en los dominios europeos donde Google tenga presencia. Por ejemplo Google.es, en el caso de España. Esto sucederá cuando una persona natural o compañía invoquen al ‘Derecho al olvido’, opción que tienen los ciudadanos de eliminar la indexación de contenidos cuando este afecte a su vida personal o laboral por asociación.
Esta situación parece cómoda para Google, pero los reguladores de la Unión Europea desean que el ‘Derecho al olvido’ se aplique en todas las Webs del buscador en el mundo, debido a que es muy fácil cambiarse de un Google.fr (Francia) a Google.com (Global – Estados Unidos) y volver a encontrar el contenido nuevamente.
Desde mayo del 2014, cuando Google se vio obligada a iniciar este sistema de eliminación de contenidos, han recibido más de 200.000 solicitudes de toda Europa, que afectan a más de 700.000 direcciones online.
Para la compañía la regulación y aplicación del «Derecho al olvido’ debe tener un límite, ya que es un concepto europeo. Por lo pronto, Google, espera la publicación -a fines de este mes- de un reporte realizado por un grupo de expertos en privacidad y libre flujo de la información online. Con eso la compañía definirá una postura para aplicar la orden de la Unión Europea y tener los pretextos necesarios para no tener que ir a tribunales.