Los hombres y mujeres mayores que usan Internet con frecuencia son más propensos a tener un estilo de vida que incluya muchas conductas que previenen el cáncer. Así lo indica un estudio reciente que aparece en la edición del 22 de octubre de la revista Cancer Epidemiology, Biomarkers & Prevention.
Los investigadores hallaron que mientras más tiempo pasen los adultos mayores en Internet, más probable es que sean partícipes de conductas saludables.
Según el informe, los internautas que son adultos mayores se hacen pruebas para el cáncer de colon con más frecuencia y son más propensos a ser físicamente activos, a comer una dieta saludable y a fumar menos.
Los hallazgos se sostuvieron incluso después de que los investigadores tomaron en cuenta el estatus socioeconómico, las capacidades físicas y la función mental de las personas.
«El aspecto interesante es que hay una relación entre dosis y respuesta entre el uso de Internet y las conductas que previenen el cáncer», planteó el autor del autor del estudio, Christian von Wagner.
El estudio
En el estudio participaron casi 6 000 hombres y mujeres a partir de los 50 años de edad que rellenaron encuestas cada dos años entre 2002 y 2011, sobre sus datos demográficos, capacidades mentales, actividad física y dieta. También se les preguntó sobre su uso de Internet y correo electrónico, y sobre las pruebas para la detección del cáncer colorrectal y de mama.
Los investigadores hallaron que el 41% de los encuestados no usaba Internet, el 38% reportó usar Internet esporádicamente, y el 20% dijo que entraban a la red con regularidad.
Los usuarios de Internet de ambos sexos tenían un 50% más de probabilidades de hacer ejercicio y un 24% más de probabilidades de comer cinco porciones de frutas y verduras todos los días.
Por otro lado, las personas que usaban Internet de forma constante también tenían un 44% menos probabilidades de fumar.
Uso de Internet
El estudio también reveló que la demografía tiene mucho que ver con qué tanto utilizan Internet las personas. El uso fue más prevalente entre las personas más jóvenes, blancas y que tenían más dinero y un mayor nivel educativo.
Los hombres también usaban Internet más que las mujeres.
Otro dato recolectado fue que el uso de Internet es mucho menos prevalente entre los discapacitados y entre los que eran mayores, tenían menos riqueza y no eran blancos.
«Es importante que los legisladores reconozcan el rol que Internet desempeña al influir las desigualdades en los resultados del cáncer, y que ayuden a aumentar el acceso a internet en este sector demográfico», planteó von Wagner.
Aunque el estudio mostró una asociación entre el uso de Internet y las conductas de prevención del cáncer, no demostró una relación causal.