Elon Musk, el propietario de la red social «X», anteriormente conocida como Twitter, ha declarado que planea demandar a la Liga Anti-Difamación (ADL) por difamación. Musk sostiene que las acciones de la ADL han llevado a una disminución significativa en los ingresos publicitarios de la plataforma en Estados Unidos. Según el empresario, específicamente esta organización ha ejercido presión sobre los anunciantes, lo que ha resultado en una caída del 60% en las ganancias por publicidad.
La controversia se centra en las acusaciones de la ADL de que la red social ha permitido discursos de odio y antisemitismo. La organización ha sido especialmente crítica con Musk por los cambios que ha implementado en la plataforma, incluido un programa de amnistía para cuentas suspendidas. Estos cambios, según la ADL, han llevado a un aumento en el acoso y el discurso de odio en la plataforma.
Musk ha defendido su postura a favor de la libertad de expresión, aunque ha dejado claro que está en contra de cualquier forma de antisemitismo. El empresario ha argumentado que las acusaciones de la ADL son infundadas, causando una «destrucción de valor» de aproximadamente 4 mil millones de dólares.
La Liga Anti-Difamación ha participado recientemente en eventos significativos de derechos civiles, como el 60º aniversario de la Marcha en Washington. Además, han declarado que no se dejarán intimidar por ataques, y que continuará su lucha contra todas las formas de odio. Aunque la ADL no ha comentado sobre la amenaza de demanda, ha emitido una declaración en la que afirma que los ataques recientes son coherentes con los esfuerzos por limitar a los grupos de vigilancia de derechos civiles.
Musk ha utilizado amenazas legales en el pasado como una forma de controlar el discurso en la plataforma. Ha sido criticado por hacer cambios drásticos en ella, incluido el establecimiento de muros de pago y la limitación de características. Estas acciones han generado controversia y han sido objeto de escrutinio público.
Y ojo, ADL no ha sido la única en apuntar con el dedo a Twitter por el discurso de odio presente. En junio pasado, la Comisionada de eSafety de Australia, Julie Inman Grant, amenazó a «X» con multas millonarias por discursos de odio y falta de moderación en la red social. Esto, sumado a otros informes, como el de la Universidad de Montclair, donde se destaca el aumento de tweets con términos de odio desde que Musk tomó el control de la plataforma social.