A partir de 2015 las personas que descargan contenidos ilegales o «pirateados» en Reino Unido, no cometerán delito alguno. El gobierno de aquel conglomerado de naciones, tomó la decisión de despenalizar este conducto a partir del próximo año.
Hasta ahora las personas que son sentenciadas por la descarga ilegal en Internet, se exponían a castigos desde el control al ingreso de la Web a penas de prisión. Esto no disminuyó las descargas ilícitas, todo lo contrario en realidad.
La nueva legislación incluirá en la pantalla de los usuarios cuatro avisos antes de realizar cualquier descarga, que indicarán que el acto que se está llevando a cabo es ilegal, como también ofrecer sitios legales de descarga.
Además, el Reino Unido, se unió a sitios legales de descarga en Internet para promover una campaña que induzca a los usuarios a cambiar su comportamiento en la Web y que prefieran medios legales para acceder contenidos en la misma.