Escribí una nota titulada «¿Cuáles son las contraseñas más fáciles de hackear?», cuyo fin era que la gente pudiera revisar si su contraseña coincide con una de las mencionadas en la lista del post y, si es así, pueda cambiarla para tener la información personal de sus cuentas mucho más a segura.
Poco después, uno de nuestros lectores, identificado en Twitter como @Slayer_X, me hizo ver que la palabra «hackear» estaba mal empleada ya que, según me dejó saber en un tweet, «descubrir contraseñas no es hackear».
La tercera edición de The New Hackers Dictionary señala que hoy es obsoleto emplear la palabra hacker para referirse a un entrometido malicioso que intenta descubrir información sensible (como contraseñas) por hurgar. En ese sentido, el término correcto es «crackear».
¿Qué es en realidad un hacker?
Un hacker es alguien que descubre las debilidades de una computadora o de una red informática, aunque el término puede aplicarse también a alguien con un conocimiento avanzado de computadoras y de redes informáticas.
Los hackers pueden estar motivados por una multitud de razones, incluyendo fines de lucro, protestas o simplemente por el desafío.
Algo divertido es que, según The New Hackers Dictionary, la definición de hacker es, originalmente, «alguien que hace muebles con un hacha». No obstante, el término puede ser usado para:
- 1. Una persona que disfruta explorando los detalles de sistemas programables y cómo extender sus capacidades, a diferencia de la mayoría de los usuarios, que prefieren aprender sólo el mínimo necesario.
- 2. Un amante de la programación (incluso obsesivamente), y no sólo teoriza acerca de ella.
- 3. Una persona capaz de apreciar el valor de programar algo.
- 4. Una persona que es buena en programar rápidamente.
- 5. Un experto en un determinado programa.
- 6. Un experto o un entusiasta de cualquier tipo. Sí, así como lo lees, uno puede ser un hacker de la astronomía, por ejemplo, si le entusiasma mucho.
- 7. Alguien que disfruta el reto intelectual de superar o burlar creativamente limitaciones.
Además, el término hacker también tiende a connotar la pertenencia a la comunidad global definida por la red. Asimismo, auto-llamarse hacker implica que la persona cumpla con algo llamado «La ética hacker».
¿Qué es la ética hacker?
La ética hacker es una nueva ética surgida y aplicada a las comunidades virtuales o cibercomunidades, aunque no exclusivamente.
La expresión se suele atribuir al periodista Steven Levy en su ensayo Hackers: Heroes of the Computer Revolution, publicado en 1984. En su ensayo, Levy escribe y enuncia con detalle los principios morales que surgieron a finales de los años cincuenta en el Laboratorio de Inteligencia Artificial del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y, en general, en la cultura de los aficionados a la informática de los años sesenta y setenta.
Aquellos principios -que se resumen en el acceso libre a la información y en que la informática puede mejorar la calidad de vida de las personas- han constituido la base de la mayor parte de definiciones que se han elaborado posteriormente. Uno de sus mentores actuales ha sido el finlandés Pekka Himanen.
Himanen, en su obra «La ética del hacker y el espíritu de la era de la información» (que contiene un prólogo de Linus Torvalds y un epílogo de Manuel Castells), comienza por rescatar una de las acepciones originales del término hacker.
Según Himanen, un hacker no es un delincuente, vándalo o pirata informático con altos conocimientos técnicos, sino que es todo aquel que trabaja con gran pasión y entusiasmo por lo que hace. De ahí que el término hacker pueda y deba extrapolarse a otros ámbitos como ser, por ejemplo, el científico.
Himanen se expresa así:
«En el centro de nuestra era tecnológica se hallan unas personas que se autodenominan hackers. Se definen a sí mismos como personas que se dedican a programar de manera apasionada y creen que es un deber para ellos compartir la información y elaborar software gratuito.
No hay que confundirlos con los crackers, los usuarios destructivos cuyo objetivo es el de crear virus e introducirse en otros sistemas: un hacker es un experto o un entusiasta de cualquier tipo que puede dedicarse o no a la informática. En este sentido, la ética hacker es una nueva moral que desafía la ética protestante del trabajo, tal como la expuso hace casi un siglo Max Weber en su obra La ética protestante y el espíritu del capitalismo, y que está fundada en la laboriosidad diligente, la aceptación de la rutina, el valor del dinero y la preocupación por la cuenta de resultados.
Frente a la moral presentada por Weber, la ética del trabajo para el hacker se funda en el valor de la creatividad, y consiste en combinar la pasión con la libertad. El dinero deja de ser un valor en sí mismo y el beneficio se cifra en metas como el valor social y el libre acceso, la transparencia y la franqueza».
Para quienes desean profundizar aún más, pueden leer una de las ediciones de The New Hackers Dictionary. Una obra que incluye y aclara los orígenes oscuros de varios términos de la jerga.
¿Por qué la relación entre hackers y cibercrimen?
A partir de 1980 había aparecido la cultura hacker, programadores aficionados o personas destacadas o con un importante conocimiento de informática. Estos programadores no solían estar del lado de la ilegalidad, y aunque algunos conocían técnicas para burlar sistemas de seguridad, se mantenían dentro del ámbito legal.
Pero con el tiempo surgieron personas que utilizando su conocimiento en informática, aprovechaban debilidades o bugs de algunos sistemas informáticos y los ‘crackeaban’, es decir, burlaban el sistema de seguridad muchas veces entrando en la ilegalidad.
A estas personas se las continuó llamando hackers, por lo que alrededor de 1985 los hackers originales empezaron a llamarlos crackers en contraposición al término hacker, en defensa de éstos últimos por el uso incorrecto del término.
En esta controversia, el término hacker es reclamado por los programadores, quienes argumentan que alguien que irrumpe en las computadoras se denomina «cracker», sin hacer diferenciación entre los delincuentes informáticos —sombreros negros— y los expertos en seguridad informática —sombreros blancos—.
Algunos hackers de sombrero blanco afirman que ellos son quienes merecen el título de hackers y que, en contraposición, los “de sombrero negro” deben ser llamados crackers, sin excepción.
Conclusiones
Así las cosas, llegué a conclusión de que los medios de comunicación muchas veces erramos en no hacer una marcada diferencia entre el término «hacker» y «cracker», creando confusión sobre la definición de los mismos.
Acá hay solo algunos ejemplos, de los muchos que encontré: