Mark Zuckerberg y Meta fueron acusados por una exdirectiva de la compañía de haber propuesto medidas extremas para ingresar al mercado chino, incluyendo la censura de contenidos y el almacenamiento de datos de usuarios dentro de China. Sarah Wynn-Williams, quien fue directora global de políticas de Meta para China hasta 2017, presentó una denuncia de 78 páginas ante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) en abril, detallando estos intentos de cooperación con el Partido Comunista Chino (PCCh).
Entre los puntos principales de la acusación, se menciona la creación de un sistema de censura diseñado en 2015 que permitía la detección y eliminación automática de términos restringidos en la plataforma. Además, la compañía habría propuesto la instalación de un «editor en jefe» con autoridad para eliminar publicaciones o incluso cerrar el acceso a la plataforma en China en caso de «agitación social».
La exdirectiva también afirmó que Meta estaba dispuesta a almacenar datos de usuarios chinos en servidores dentro del país, lo que habría facilitado el acceso del gobierno a la información personal de sus ciudadanos, incluidos los residentes de Hong Kong. Además, en 2017, la empresa restringió la cuenta de Guo Wengui, un empresario exiliado en Estados Unidos que criticaba al gobierno chino, presuntamente en respuesta a la presión de las autoridades del país asiático.
Zuckerberg y las negociaciones secretas con China
Según la denuncia, Zuckerberg ordenó a su equipo en 2014 que comenzara a trabajar intensamente en adaptar los servicios de Facebook para China. Se creó un grupo de trabajo denominado «China team», cuyo proyecto interno recibió el nombre en clave de «Project Aldrin», en referencia al astronauta Buzz Aldrin. Documentos internos revelan que en julio de ese año se redactó una carta dirigida a Lu Wei, entonces jefe adjunto del Departamento de Propaganda del PCCh, en la que se ofrecía «trabajar más estrechamente con todas sus embajadas y consulados en el mundo».
Las conversaciones con el gobierno chino habrían avanzado en 2015, momento en el que se implementó el sistema de censura y se contrataron alrededor de 300 moderadores de contenido para asegurar el cumplimiento de las normas establecidas por el régimen. En 2017, Meta lanzó aplicaciones móviles en China a través de una empresa local como parte de su estrategia para ingresar al mercado, aunque sin éxito a largo plazo.
Cambio de postura y respuesta de Meta
En 2019, Zuckerberg afirmó públicamente que su empresa defendía la libertad de expresión y criticó las restricciones en Internet impuestas por China. Sin embargo, la denuncia sostiene que en reuniones internas el CEO de Meta expresó que la compañía se beneficiaría si TikTok, de propiedad china, fuera prohibida en Estados Unidos.
Meta negó las acusaciones de la exdirectiva y afirmó que su interés en operar en China siempre fue de conocimiento público. Andy Stone, portavoz de la empresa, declaró que Meta «finalmente decidió no seguir adelante con las ideas exploradas», añadiendo que Wynn-Williams fue despedida en 2017 por bajo rendimiento.