La administración del presidente, Joe Biden, anunció la prohibición de la venta del software antivirus de Kaspersky en Estados Unidos, citando riesgos de seguridad debido a los posibles vínculos de la compañía rusa con el gobierno de su país. Esta medida prohíbe a Kaspersky vender a nuevos clientes a partir de julio y prestar servicios a clientes actuales después de septiembre.
La Secretaria de Comercio, Gina Raimondo, afirmó que el acceso privilegiado del software a los sistemas de las computadoras podría permitir el robo de información sensible, la instalación de malware y la retención de actualizaciones críticas.
La decisión se basa en preocupaciones de que Kaspersky pueda ser utilizado por Rusia para recolectar y utilizar información personal de los estadounidenses. Raimondo instó a los usuarios actuales a dejar de usar el software y cambiar a alternativas para proteger sus datos. Kaspersky ha defendido que la decisión de Estados Unidos está basada en preocupaciones teóricas y el clima geopolítico actual, más que en una evaluación integral de sus productos y servicios.
Difícil terreno para Kaspersky en EE. UU.
Además de prohibir las ventas, la administración Biden incluirá a tres unidades de Kaspersky en una lista de restricciones comerciales, lo que afectará la reputación de la empresa y podría impactar sus ventas internacionales. La idea —se supone— es eliminar riesgos de ciberataques rusos y restringir transacciones con empresas de telecomunicaciones y tecnología de países adversarios.
El senador demócrata Mark Warner, presidente del Comité de Inteligencia del Senado, apoyó la medida, afirmando que es ilógico permitir que programas rusos con acceso profundo a dispositivos continúe vendiéndose a estadounidenses. Kaspersky respondió diciendo que no amenaza la seguridad nacional del país y que explorará opciones legales para preservar sus operaciones.
Recordemos que en 2017 el Departamento de Seguridad Nacional prohibió el uso de productos Kaspersky en redes federales debido a presuntos vínculos con la inteligencia rusa. Esta presión aumentó tras la invasión rusa de Ucrania en 2022, lo que llevó a advertencias privadas del gobierno de EE. UU. sobre el potencial uso malintencionado del software por parte de Moscú.
Las nuevas reglas, que entrarán en vigor el 29 de septiembre, también incluyen multas para los vendedores y revendedores que violen las restricciones, y posibles cargos criminales para infractores intencionales.