Extraño, sí. ¿Tierno? También. Una mezcla de sentimientos, pero envueltos finalmente de alegría, fue la solicitud de la pequeña Audrey a su madre Rebecca. La pequeña para su tercer cumpleaños quería sólo una cosa: que la celebración fuese entorno a la caca.
Por meses los padres de Audrey intentaron sugerirles otros temas para la fiesta, pero la niña sólo repetía que quería ‘bolas de caca’ y un ‘pastel de caca’. Finalmente Rebecca y su marido decidieron apoyar su idea y le dieron la fiesta que tanto deseaba.
El emoji de caca
La extraña celebración fue todo un éxito. Incluso para los otros padres de los niños que fueron invitados, el asunto les parecía gracioso sin darle mayor importancia. En la celebración, todos los niños pudieron golpear una piñata con la forma del emoji de excremento, llena de dulces como los Tootsie Rolls y Kisses de Hershey’s.
Además -para la oportunidad- los papás se disfrazaron del mismo emoji, como así la pequeña hija que tenía una camiseta conmemorativa. La fiesta se realizó el pasado octubre, pero fue recientemente que se hizo viral gracias a una publicación en The Huffington Post.