Hoy en día una de las recomendaciones más escuchadas y generalizadas para administrar tus contraseñas en Internet, es resguardarse gracias a las autenticaciones de dos pasos o factores. Probablemente ya escuchaste de esto, pero a medida que evoluciona la red, aparecen nuevos términos que son complicados de entender o diferenciarlos.
Es por lo mismo que gracias a la ayuda de los chicos de Intel Security, nos tomamos un minuto para desglosar las diversas formas de autenticación, cómo funcionan, y cómo pueden ayudar a proteger su información en línea.
Autenticación de factor único
La autenticación de un único factor es la más simple: simplemente necesita corresponder una cosa para verificarse en línea. El ejemplo más popular es su nombre de usuario y su contraseña. Es la base de la mayoría de verificaciones digitales hoy en día, y un método que probablemente usas diariamente para ingresar a sus cuentas de correo electrónico.
Autenticación de dos factores
La autenticación de dos factores es un poco más complicada. Además de la combinación de contraseña/nombre de usuario, se pide verificar quién eres con algo que tú, y sólo tú posees, como un teléfono celular. En resumen: usa dos factores para confirmar que se trata de ti.
Hay un buen motivo para esto: hoy en día, obtener acceso a algo supuestamente confidencial no es tan difícil. Muchas empresas y perfiles de consumidores están comprometidos por culpa de contraseñas simples y fáciles de adivinar. Al requerir una segunda forma de identificación, los hackers están limitados a lo que pueden extraer.
Los sistemas de dos factores más populares de la actualidad, generalmente funcionan enviando un código único al teléfono vinculado a su cuenta o utilizando una llave física USB para validar en el equipo que te conectas.
Autenticación multifactor
Además de la combinación de nombre de usuario y contraseña, la autenticación multifactor requiere que el usuario confirme una serie de cosas para verificar su identidad – generalmente algo que tengan, un factor físico único de sí mismo – como la retina o las huellas digitales. Otras formas de autenticación pueden incluir la ubicación y hora del día.
A pesar que la autenticación multifactor parece como una fantasía de ciencia ficción, en realidad es bastante común, particularmente entre bancos. Pero este sistema está listo para avanzar incluso más. Gracias a los avances en tecnología de cámaras, hoy en día estamos implementando un nuevo método seguro de reconocimiento: reconocimiento facial.